La fisiogenómica es una herramienta indispensable como complemento a nuestros tratamientos. Nos permite conocer como se desarrollan las diferentes patologías en función de lo que comemos y su repercusión en el aparato locomotor. Unas recomendaciones nutricionales complementarias al tratamiento manual podrán ayudarte con síntomas como: migrañas, mareos, vértigos, acné, dolores menstruales, dolores articulares inespecíficos, sinovitis, calcificaciones, contracturas repetitivas, tendinopatías, artrosis, artritis, roturas de fibras recidivantes, y problemas musculares en general, patologías crónicas y degenerativas, enfermedades autoinmunes, patología inflamatoria y un largo etc.