Tu ciclo mensual está controlado por dos hormonas principales, el estrógeno y la progesterona. Después de la menstruación suben los niveles de estrógeno desarrollándose así un óvulo que es liberado por el ovario (ovulación). Además el útero engruesa, gracias a la progesterona, preparándose para recibir al óvulo fertilizado.
El óvulo desciende por la trompa de falopio y, si no es fecundado se reabsorbe naturalmente. Los niveles de estrógeno y progesterona bajan, y el recubrimiento del útero se desprende causando el sangrado menstrual o regla.
Los anticonceptivos hormonales contienen versiones artificiales (sintéticas) de las hormonas, estinilestradiol que actuarán sobre los receptores de estrógenos, y los progestágenos que actuarán sobre los receptores de progesterona. Interfieren en el proceso natural de nuestras hormonas:
- impidiendo que tus ovarios liberen el óvulo
- espesando la mucosidad en el cuello uterino, lo que dificulta más a los espermatozoides entrar a tu útero y fertilizar al óvulo
- haciendo que el recubrimiento del útero sea demasiado delgado para permitir que un óvulo fertilizado se implante
Al no permitir la ovulación, el sangrado que producen no es una menstruación, se denomina sangrado por deprivación hormonal. En realidad no tienes la regla, por tanto no podemos decir que tu ciclo se haya regulado, porque no hay ciclo.
¿Cuales son los efectos secundarios de tomar anticonceptivos hormonales?
Estas hormonas sintéticas no producen el mismo efecto que las hormonas naturales en nuestro organismo, los efectos secundarios que producen a largo plazo son:
- Alteraciones de la coagulación: mayor riesgo de sufrir enfermedades cerebro vasculares y tromboembolismos
- Inflamación metabólica
- Empeora el perfil lipídico y el metabolismo de la glucosa y la resistencia a la insulina
- Mayor riesgo de padecer cáncer hormonodependiente (cáncer de mama o de cuello de útero)
- Dolores de cabeza por sobrecarga hepática por exceso de estrógenos en sangre
- Sequedad vaginal y disminución del apetito sexual
- Infecciones urinarias recurrentes
- Alteraciones tiroideas
- Depresión, bajo ánimo y cambios de humor
- Mayor riesgo de infertilidad. En ocasiones, tras tomas muy prolongadas, el ovario no consigue resetear su función, o tiene mayores dificultades.
Los anticonceptivos hormonales son un FARMACO, que en casos puntuales pueden ser beneficiosos para la mujer (en aquellos casos donde es mejor asumir los efectos secundarios del fármaco que el riesgo de la patología a tratar), como es en casos extremos de Endometriosis (donde no encuentran ningún alivio con otros métodos), Anemias ferropénicas graves (usado de forma puntual para cortar sangrado) etc…. pero nunca tomada de forma frecuente y mantenida en el tiempo y menos como «reguladora». Que no nos engañen, si decidimos tomarla, que sea con toda la información en la mano y valorando bien todas las consecuencias para la salud.