Los rectos del abdomen son los músculos que forman la coloquialmente conocida como “tableta de chocolate”, que se encuentran en la parte anterior de nuestro abdomen. Están unidos entre sí a través de un tejido conectivo llamado línea alba.

Este tejido en ocasiones se rompe haciendo que estos dos músculos se separen entre sí. Esto puede ocurrir debido a un gran estiramiento de la pared abdominal, por esfuerzos repetidos que generan mucha tensión en la zona (ejercicio hiperpresivo como los abdominales tradicionales, estreñimiento crónico, por esfuerzos repetitivos con cargas de peso que aumentan mucho la presión intraabdominal…)

En el embarazo (por causas hormonales, por la progesterona y la relaxina y el propio cremiento del bebé) se produce siempre una diástasis abdominal.

Suele remitir sola y volver a su posición original durante las primeras 8 semanas, pero en algunas ocasiones no es así y esto puede provocar, además de un problema estético (distensión abdominal, sensación de tripa de embarazada) otra serie de problemas, como son:

• Inestabilidad en zona lumbar y pelvis lo que producirá dolor lumbar y pélvico, hernias discales… porque los abdominales dejan de contener y gestionar las presiones abdominales
• Alteraciones en suelo pélvico, ya que las presiones intraabdominales al no tener sujeción de la musculatura abdominal se dirigirán hacia el suelo pélvico, aumentando el riesgo de prolapsos de útero, vejiga y recto.
• Alteraciones de la respiración, la debilidad de la faja abdominal altera la posición del diafragma y este pierde su efectividad en la mecánica respiratoria lo que produce sensación de fatiga al respirar
• Síntomas digestivos: hernias de las vísceras abdominales, hinchazón, digestiones pesadas….La musculatura no puede contener las vísceras y estas protuyen hacia fuera

 

¿Como podemos detectar si tenemos diástasis?

Nos tumbamos boca arriba, flexionamos rodillas y apoyamos los pies en el suelo. Colocamos una mano detrás de la cabeza y la otra en el ombligo, colocamos aquí los dedos y hacemos un abdominal tradicional elevando cabeza hacia los pies.

Y en esta posición medimos con el ancho de los dedos la separación que hay entre los músculos rectos del abdomen. Si percibes que entran dos o mas dedos a lo ancho, y estos dedos se hunden sin notar resistencia del tejido o observas un bulto hacia arriba sería conveniente hacer una valoración con tu fisioterapeuta especializado.

 

¿Como solucionar diástasis?

Es fundamental evitar los abdominales tradicionales (flexionar el tronco hacia las rodillas o los abdominales oblicuos, o elevar piernas..) ya que aumentan la presión intraabdominal aumentando todavía mas la separación de los rectos del abdomen.

Y realizar un plan de tratamiento que consistirá:

 

• Estimular la regeneración de la línea alba, aumentando la producción de colágeno y la recuperación del tejido conectivo de la zona uniendo así de nuevo los rectos del abdomen. Esto lo conseguiremos a través de la aplicación de diatermia (como la indiva).
• Programa de ejercicios específicos para la re-tonificación de la zona, ejercicios core, hipopresivos y suelo pélvico
• Plan nutricional para desinflamar el abdomen.

 

Es importante prevenir y evitar que el problema se agrave y que sea necesaria una cirugía.

Consulta lo que puede hacer por ti el tratamiento de fisioterapia.